Cuando contemplas el cielo nocturno y observas las estrellas y
galaxias, o cuando reflexionas sobre la tierra que te rodea…
¿alguna vez te has preguntado: ¿Quién creó todo esto? ¿Y por qué
con tanta precisión?
¿Quién puso en movimiento a los planetas?
¿Quién hizo de la noche un tiempo para descansar y del día un
tiempo para la actividad?
¿Quién formó este sistema impecable, sin defecto ni error?
La respuesta yace profundamente en nuestra naturaleza: Es Allah.
El Corán no te pide que creas sin pensar; más bien, te invita a
reflexionar.
A ver con tus ojos y pensar con tu mente… porque en esta
creación hay signos evidentes que apuntan a la existencia de un
Creador sabio.
Este sistema perfecto no es una coincidencia, ni está carente de
propósito.
Es un mensaje dirigido a todos aquellos que usan su intelecto.